Si te preocupa la estética de tu sonrisa, seguramente estés al tanto de un buen número de tratamientos existentes y que permiten mejorarla notablemente. Blanqueamientos, ortodoncias, implantes… En esta ocasión, como especialistas en carillas dentales en Barcelona, nos gustaría aprovechar el siguiente post para explicarte las diferencias entre las distintas clases que existen hoy en día.
En un artículo anterior en este blog, ya os explicamos de manera detallada qué son las carillas dentales. Básicamente, se trata de unas pequeñas láminas que se adhieren a la cara externa de nuestros dientes mediante un cemento o resina especial y que permite corregir pequeños errores en nuestra boca y obtener una sonrisa mucho más atractiva.
Pero, en este campo, son dos las alternativas que se tienen a la hora de apostar por las carillas dentales: composite o porcelana. Se trata de dos materiales diferentes y que, sin embargo, ofrecen grandes resultados. Es por ello que nos gustaría aprovechar estas líneas para contarte las características de cada opción.
Carillas de composite
Para esta carilla, se utilizará un material con una base de resina acrílica mezclada con cerámica. De esta manera, se obtiene una resistencia alta y unos resultados notables. Esta alternativa tiene la ventaja de que se coloca directamente sobre el diente, aunque antes hay que moldear su forma y darle el tamaño deseado, debiendo pasar por una fase de endurecido en luz ultravioleta.
Gracias a nuestra experiencia en el trabajo con carillas dentales en Barcelona, podemos contarte que, entre sus principales ventajas, hay que destacar que el procedimiento no requiere una gran preparación previa y que es un tratamiento rápido que ofrece resultados inmediatos.
Si hubiera que señalar algún punto negativo, tendríamos que hablar de su duración, estimada entre 5 y 10 años. Pese a ser muy resistentes, se debe acudir a nuestro especialista para un perfecto mantenimiento.
Porcelana, una perfecta elección para carillas dentales en Barcelona
La segunda alternativa que tenemos ante nosotros es la porcelana, un material que ofrece una resistencia y durabilidad espectaculares, muy similares a las de las propias piezas dentales. Son unas carillas mucho más elaboradas y, por tanto, el procedimiento puede alargarse ligeramente más en el tiempo.
Además, se deben tomar las medidas de los dientes del paciente, de manera que, desde el laboratorio, se pueda realizar un diseño totalmente personalizado. Como expertos en este campo, podemos contarte que su resultado es tremendamente natural y el color no suele sufrir variación alguna.