Si eres de esa clase de personas a las que les gusta exhibir una sonrisa radiante, desde Sonríe Estudio Dental tenemos para ti un aliado que te ayudará a conseguirla: Alineadent. Se trata del sistema de ortodoncia invisible más avanzado de la actualidad. ¿Quieres saber por qué? ¡Te lo presentamos en nuestro nuevo post!
Cada vez son más los pacientes que apuestan por esta clase de ortodoncia. Se trata de un sistema digitalizado revolucionario que ofrece resultados sorprendentes. Muestra una sonrisa saludable, sana y atractiva de una manera rápida. ¡Todo al alcance de tu mano!
El tratamiento con Alineadent no puede ser más sencillo. Se basa en la utilización de dos alineadores que serán sustituidos cada dos semanas. Estas férulas transparentes van desplazando las piezas dentales poco a poco hasta conseguir emplazarlas en el sitio correcto, obteniendo el objetivo diseñado al principio del tratamiento.
Gracias a nuestra experiencia ofreciendo a todos nuestros pacientes este exitoso tratamiento, podemos contarte que una parte importante de la eficacia de esta ortodoncia es la constancia. En este sentido, es muy importante llevar los alineadores puestos unas 22 horas al día. De hecho, es conveniente retirarlos únicamente a la hora de comer y para lavarse los dientes (aunque hay pequeñas excepciones).
Razones para apostar por Alineadent
Desde Sonríe Estudio Dental nos gustaría aprovechar estas líneas para contarte por qué este tratamiento está diseñado especialmente para ti. En primer lugar, una de las mejores razones (sino la mejor) para iniciar un procedimiento de Alineadent es conseguir una sonrisa radiante. No en vano, se trata de nuestra mejor carta de presentación ante el resto de personas.
En segundo lugar, hay que señalar que se trata de una ortodoncia invisible. Este hecho consigue convencer a aquellos escépticos que no desean lucir hierros en sus dientes, limitando su vida social por vergüenza. Con Alineadent se conseguirá recolocar los dientes sin que nadie se dé cuenta a simple vista.
Tampoco hay que olvidar que, aunque se recomienda no retirar las férulas, es posible quitárselas en ciertos momentos, como la hora de comer, para lavarse los dientes o si tienes algún evento o cita importante. Además, se trata de un tratamiento realmente cómo y práctico, sin dolores, molestias ni nada parecido.
En último lugar, el hecho de utilizar la última tecnología también se refleja en el hecho de poder usar un visor 3D para mostrar una previsión virtual del resultado final del tratamiento. El paciente conoce de antemano los resultados que se van a conseguir.